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El clásico capitalino se vistió de rojo y blanco

Independiente Santa Fe, luego de estar perdiendo 1-0 ante Millonarios, remontó el compromiso y se impuso, goleando 4 por 2 a su máximo rival, en el estadio “El Campín”.

Crédito: Colprensa

Por Sofía Ramírez – Semillero CODEC Estudios en Comunicación y Deporte

Transcurrían las 8:20 de la noche, del 10 de septiembre, y todo estaba listo, en el estadio Nemesio Camacho “El Campín”, de Bogotá, para el clásico capitalino número 313. Las gradas del escenario estaban a reventar, principalmente con hinchas de Millonarios, que con gritos albiazules animaban sin descanso, ejerciendo como locales en esta oportunidad, al vigente campeón del fútbol profesional colombiano.

Sonó el silbato y dio inicio el partido. Los dos equipos empezaron a atacar, alternando de una zona a la otra del campo, hasta que en el minuto 36 de la primera mitad, y en la única llegada del equipo hasta ese punto, Millonarios abrió el marcador, un 1-0 conseguido por su “amuleto”, el futbolista Jáder Valencia, quien puso a gritar y a celebrar a toda la hinchada albiazul.

Sin embargo, Santa Fe no se dio por vencido en ningún momento y, luego de dar una imagen de equipo sólido y que se aproximaba a la portería defendida por Juan Moreno, cuando estaba por finalizar el primer tiempo vio cierto grado de equidad en el encuentro, cuando expulsaron al capitán David Macalister Silva, por una falta sobre Jhojan Torres. Iba a tener que jugar Millonarios, con uno menos, durante toda la segunda parte.

Precisamente desde que sonó el pitido inicial del segundo tiempo, los “leones” de Santa Fe intentaron aprovechar la superioridad numérica, con el objetivo de remontar en el marcador. Sin que transcurrieran demasiados segundos, justo en el minuto 46, el mediocampista Daniel Giraldo, de Millonarios, cometió una falta fuerte, que el árbitro central consideró descalificadora, yéndose expulsado del clásico, lo que llevó a que el equipo azul se quedara, ya no con diez, sino con apenas nueve futbolistas, ante un conjunto visitante que mantenía los once jugadores en el terreno, para ese punto rápido y resbaladizo, por la lluvia incesante que caía desde el cielo capitalino.

Nueve minutos después, en el 55, Christian Marrugo aprovechó la iniciativa santafereña para empatar, tras un remate dentro del área local. El entrenador de Santa Fe, Hubert Bodhert, con la intención de aprovechar la diferencia numérica, había dado ingreso al joven extremo Emerson Batalla. Precisamente, en el minuto 61, llegó el segundo gol para el “rojo capitalino”, por intermedio de Batalla, ante un Millonarios que no había tomado ninguna previsión defensiva, pese a las dos expulsiones sufridas. Tras dar la vuelta al marcador, no pasaron ni cinco minutos cuando llegó el tercer tanto y, posteriormente, el cuarto en el marcador, a favor de Independiente Santa Fe, merced a un doblete del atacante Yeison Moreno.

Así, en cuestión de minutos, Santa Fe goleaba al actual campeón del fútbol colombiano y su clásico rival. Dentro de la fanaticada local, impactada por la forma como habían dado vuelta las circunstancias, algunos hinchas, en vez de seguir animando, decidieron retirarse del estadio, decepcionados por la derrota, con goleada, que parecía ya imposible de equiparar, transcurridos 66 minutos de partido.

Realizadas otras modificaciones de parte y parte, el juego entró en un periodo de menor emoción, hasta que, en el minuto 76, volvió la esperanza para los albiazules, tras la segunda anotación de Valencia, que ponía el resultado 4-2, favorable aún para Independiente Santa Fe.

De ahí en más, el equipo visitante fue prudente para no exponer la ventaja lograda, mientras que, mermado por la diferencia de jugadores, Millonarios no logró acercarse otra vez en el marcador. Así, Santa Fe le puso punto final a la mala racha que traía frente a su rival de patio, para celebrar una vez llegó el último pitazo, con los seguidores presentes en una de las zonas de “El Campín”.

Con esta victoria, la escuadra cardenal ascendió al tercer lugar de la tabla, potenciando sus opciones de disputar los cuadrangulares finales del torneo; mientras que Millonarios se alejó de los ocho primeros y, con una diferencia de gol negativa, tendrá que rendir muy bien en lo que resta del todos contra todos, si quiere ganarse el derecho de defender el título obtenido el pasado 24 de junio, frente a Atlético Nacional.

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