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Crónica: Santuario de la Milagrosa, ¿Mito o Realidad?

Escrita por: Catalina Agudelo Camacho

En un país tan religioso como lo es Colombia, encontrar milagros alrededor de la nación es común, sin embargo, algunos creen que son reales y otros que es simple fanatismo.

En el municipio de Villeta, Cundinamarca, se encuentra un lugar poco conocido, no solo por los habitantes, sino también por los turistas. Se trata del Santuario de la Milagrosa, lugar que abarca majestuosas teorías, donde se relata milagros de sanación y algunos sucesos de maldad.

Esta historia inicia el 28 de abril de 2004, una mujer perteneciente a una familia bogotana muy católica, la cual no autorizó revelar su identidad, en horas de la tarde al llegar a su apartamento después de hacer unas diligencias, observa la estatua de la virgen, la cual le había regalado su esposo, con una apariencia diferente.

“he visto la imagen la cual él me regaló, la cual se encuentra en mi cuarto, en una repisa, llena de escarcha, le comenté a mi esposo, pero él no sabía nada. Había un sacerdote mayor, ya retirado, y le digo yo -padre pasó tal cosa con una imagen de la virgen-, y lo único que me contestó -Ah, sí, es que de pronto la virgen la está visitando, hágale un Ave María- lo realicé y no pasó nada más”

Sin embargo, no sería la única visita que tendría de ella, ya que la escarcha seguía cayendo y cada vez era de diferentes colores. Al siguiente año, el 2 de febrero, se le detectó cáncer de útero, tenía un tumor de 13 centímetros, y al ver todos los resultados que salían en los exámenes que le realizaban, lo único que decidió hacer, fue aferrarse con su vida a la virgen, tanto así, que, en uno de sus sueño, tuviera una revelación.

“En un sueño me dijo que tenía que ir a una fuente de agua vida en donde iba a hacer su obra. Me desperté le dije a mi esposo y me dijo -vamos al Chorro de Quevedo- yo nunca he ido, ni se dónde queda”. Entonces, aquella mujer toma la decisión de ir el 13 de marzo junto a su esposo a la casa de su hermano, la cual se encuentra en la verdea Bagazal al sur occidente del municipio de Villeta y allí, iniciaría la misión de María en La Bocatoma.

“Ese día íbamos por el camino hacia el rio Bocatoma, nos dirigíamos al lado izquierdo de él, pero la virgen me dijo -no, es para el otro lado- entonces nos fuimos para ese lado y mi esposo vio un campesinito y le pregunto – ¿Cómo podemos llegar a ese lado del rio?- y él le respondió -más arribita hay como una maciza, por ahí pueden bajar- y bueno llegamos al lugar y mi esposo me dijo -hazte por ahí- y ese por ahí era un lugar lleno de piedras, pero habían dos piedras gigantes y me hice en ellas, el agua me llegaba hasta la mitad de las piernas. Pasaron momentos muy especiales, donde en medio de mi nada, la virgen me pone dos dedos en mi frente y me dice -en el nombre de mi hijo y el nombre mío, proclamó que eres una mujer sana, toda enfermedad maligna ha salido de tu cuerpo- no sé cuánto tiempo paso, solo recuerdo que de ese lugar salí llena de escarcha verde, o sea, ¿y cómo me iba a caer toda esa escarcha verde? Desde ahí, se volvió aquel lugar importante para mí y mi familia”.

Desde entonces, van al lugar, así sea una vez al año y allí realizan una eucaristía por las bendiciones recibidas por la virgen María.

Para poder llegar a La Bocatoma, ubicada en la vereda Bagazal, se puede partir de la siguiente manera, si van en carro particular este puede subir a la vereda, pero si al contrario se llega en bus, en el centro de Villeta podemos encontrar camperos rojos los cuales llevan a los pasajeros hasta el lugar cobrando $2.500. Al llegar al lugar donde se encuentra la antigua estación del tren de Bagazal, se debe cruzar por la vieja carrilera del tren, caminando o por medio de los carritos de balineras, ya que este se encuentra sobre el rio, tras pasarlo, debemos dirigirnos hacia el punto conocido como El camino Real de Santa Fe, el cual es el más representativo de la colonización, al caminar por él se ven varias fincas, perros, caballos y gallinas; el clima es caliente y un poco húmedo, se siente diferente a comparación del pueblo de Villeta, su aroma campestre es inigualable.

Tras caminar para llegar al Santuario de la milagrosa, Nancy Torres, quien fue la guía turística en esta odisea, habla de lo importante que ha sido el lugar para los habitantes y para promover el turismo, ya que muchos se acercan al lugar para intentar cumplir su milagro “la gente viene, de Honda, Villeta, La vega. Las personas, la fe, es lo que ha mantenido intacto el lugar y a la virgen. No más en invierno, el rio crece, y por más que el caudal suba, no mueve el lugar, las piedras permanecen intactas”

Se debe cruzar por el rio, el cual, quizás por la época en que se hizo la investigación, se encontraba con poco caudal, por esa razón fue más sencillo llegar al lugar, aparte de las cinco personas que intentábamos llegar a la milagrosa, no había nadie, solo se escuchaba el agua golpear con algunas piedras, los pájaros, el silbido del viento, se respiraba paz. Al llegar al lugar, misterioso sin dudar, la energía era diferente, era saber que en ese lugar nuestra mujer anónima se liberó del cáncer, era sentir un peso menos, era sentir la calma, era saber que era un lugar milagroso.

El santuario se basa en piedras del rio pegadas con cemento, pintadas de color azul, en la cima, se encuentra un trapo con la imagen de la virgen y velas encendidas a punto de terminarse, por más que el viento corriera, seguían encendidas, al lado izquierdo había una placa, donde se agradecía por los milagros recibidos. Al tocar las piedras que contemplaban a la virgen, pasan por los dedos un cosquilleo, quizás por la emoción, o porque estaban frías las rocas o simplemente si es milagroso.

Gruta de la milagrosa, fue construida como petición de la virgen María. Foto /Catalina Agudelo

Tras realizar una pequeña petición, retomamos camino para volver al pueblo, pero antes Nancy, comenta que el dueño de la finca que estaba saliendo del Santuario, conocía historias del lugar, así que al llegar a la finca ‘La milagrosa del Camino Real’, sale Don Pepe, el cual nos pidió no revelar su nombre, quien es uno de los dueños del terreno, al saber porque estábamos en la gruta, nos muestra una perspectiva diferente de todo aquello que hasta ese momento considerábamos como real. Nos atendió atrás de la puerta.  

“Todo es mentira. Ella hace unos 13 años dijo que era para oración de la familia y resulto siendo negocio. Entonces ahí venían prostitutas o mujeres del Chongo a hacer brujería ahí, un cliente de la finca se dio cuenta, de cosas que habían amaradas en la virgen. Entonces la virgen dejo de tener el uso que había dicho la señora en un inicio y se empezó a volver un desorden. Las personas que venían a ver a la virgen, a pintarla o a ponerle flores, las cosas las empezaron a dejar en la quebrada, y el daño ambiental que estaban haciendo era grande, además eso es zona privada, pertenece a la finca y no se ha podido cerrar”

Durante pandemia, el lugar fue vandalizado por tercera vez, según contaba el señor Pepe, habló con la señora de identidad no revelada, para que retiraran el lugar, pues se estaba generando un gran daño ambiental y social, ya que muchos jóvenes estaban tomando este espacio para fumar marihuana, lo cual lo convertía en un lugar peligroso. Pero ella tomó una mala actitud y no hizo nada al respecto.

“Cuando menos pensamos aquí llego ella, con un grupo con camisetas, ya tenía un negocio montado con la virgen. No lo hacemos nosotros que está en el predio, casi ni la promocionamos para evitar eso y decidimos acabar con eso, aunque haga parte de la idiosincrasia y la cultura de la gente acá. La gente en medio de sus creencias, van dañando y pintando las cosas. Por eso tomamos la decisión de decirle a la señora que se lleve esa virgen de acá. Y la verdad, esa virgen no tiene nada milagroso, acá no he escuchado de milagros que vengan de la virgen, por ejemplo, presentamos un familiar a la milagrosa dos veces y nuca se curó. No cuente con que haya ahí virgen, porque no hay”

Tras escuchar ese testimonio no se sabe a ciencia cierta si el santuario es milagroso. Al bajar al pueblo, a la mayoría de los que se encontraban sentados en el parque principal se le preguntaba si sabía del Santuario de la milagrosa y si sabía de algún milagro que se haya dado allí, la respuesta de la mayoría fue un rotundo no, los que conocían decían que habían escuchado del lugar, más nunca habían ido.

Al acercarnos a la parroquia San Miguel Arcángel, se ven a dos mujeres, muy devotas a la virgen María, pues vestían de azul y tenían collares con dijes de la virgen, se encontraban pegando stickers de la virgen en botellas de agua. Una de ellas mencionó, que existía una fiel seguidora de la virgen, conocida como “Pachanga”, quien ha acompañado a la mujer desde su milagro. “Pachanga es quien tiene conocimiento de la virgen, ella ha visto milagros. Por ejemplo, a nosotras una vez que estuvimos en santo rosario allí, nos cayó un poco de escarcha dorada y eso no les pasa a todos, pero Pachanga si sabe más”

Estas amables mujeres nos dirigieron hasta la casa de Pachanga, se encontraba más o menos a dos cuadras del lugar. El calor empezaba a ser insoportable, ya era el medio día. Tras llegar a la casa de esta fiel peregrina de la virgen, nos hizo entrar, la casa era grande, rodeada de plantas y estatuas, imágenes y dijes de la virgen María. Pachanga, una señora ya de edad, una mujer de estatura baja, un poco robusta, morena, cabello corto color negro, portaba un vestido azul claro, un collar en plata con la imagen de la virgen colgando, y su tapabocas algo fundamental hoy en día, era azul oscuro con la imagen de la virgen a un lado y una frase haciendo alusión a esta, sin embargo, por el desgaste no se lograba entender que decía. Con el mayor de los gustos, nos contó sobre lo vivido por aquella señora que recibió el milagro y la creación de la gruta, lo mismo que ya nos había contado la protagonista de esta historia por teléfono. Pero al preguntarle por otro acontecimiento milagroso no fue muy clara, solo habló de algunas mujeres que gracias a aquel lugar habían quedado embarazadas y la misteriosa escarcha que cae sobre las personas que visitan el santuario.

El Santuario de la Milagrosa, para algunos es algo sagrado, para otros es solo una manera de hace dinero y otro no saben de la existencia de este lugar. Testimonios no se encuentran, es un lugar que existe, pero a la vez no. Sin embargo, está en la vereda desde hace más de 15 años, y los más fieles van esperando el milagro que tanto sueñan. No se sabe con ciencia exacta si los milagros son reales, si es tan grande la fe que todo se puede lograr, o si todo aquello que se mencionó es ficción, devoción o fanatismo por la religión.

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