
Redactado por: Karol Santa
A lo largo de más de sesenta años de carrera, Mendes llevó los ritmos brasileños al escenario mundial. Con alrededor de 35 lanzamientos de álbumes, tres premios Grammy y una nominación al Oscar, marca un destacado desempeño mundial en la música.
La carrera de Sergio Mendes se destaca desde 1966 con la fundación del grupo Sergio Mendes & Brasil ’66, que se convirtió en un éxito instantáneo con “Mas que nada”, una canción del brasileño Jorge Ben.
El sonido de Mendes sedujo al público del mundo, fusionando la cadencia sensual de la bossa nova con arreglos jazzísticos y pop, el sonido simple pero engañosamente sincero que balanceaba la beat de la bossa nova con arreglos suaves y expansivos de sintetizador y voz.
El suave sonido de Brasil’66 era una anomalía en una década de heavy metal y big beat, que apenas podía estar marcando discos con la misma letra. Aun así, la música de Mendes resonó con el público adulto, completamente encantado y razonablemente a cuadros por el spangly new thing.
Mendes tuvo su primera gran oportunidad en los Estados Unidos en 1962, cuando se unió a un cartel en el Carnegie Hall de Nueva York que incluía a los grandes de la bossa nova, como su mentor Antonio Carlos Jobim. Tras el concierto, regresó a Brasil, pero su vida cambió drásticamente en 1964 cuando un golpe de estado militar lo forzó a abandonar el país.
Pese a tener que empezar de nuevo en un suelo extranjero, con la partida de su banda original a Brasil, Mendes decidió quedarse e intentarlo otra vez.
Su legado abarca innumerables canciones que adoptaron miles de formas en la música popular internacional. Su talento llegó hasta el cine con la canción original “Real in Rio”, de la película animada “Rio”
Su muerte, por complicaciones respiratorias, significa una pérdida irreparable para la música, pero su legado, definido por su trabajo y colaboraciones, vivirá eternamente.