
Por: Tomás León
Las IRAs representan una de las principales causas de morbilidad y costos en salud en América Latina. Según datos de 2019, el gasto relacionado con estas infecciones alcanzó aproximadamente 834 millones de dólares en América del Sur. A pesar de los esfuerzos de vacunación, la aparición de nuevas variantes y el riesgo de complicaciones como el COVID prolongado resaltan la necesidad de diagnósticos tempranos y precisos.
Ventajas de las pruebas rápidas POC para infecciones respiratorias
- Precisión en el Diagnóstico y Tratamiento Oportuno: Estas pruebas permiten a los profesionales de la salud diferenciar rápidamente entre COVID-19, influenza y VSR, facilitando intervenciones tempranas y adecuadas, especialmente en poblaciones de alto riesgo.
- Reducción en el Uso de Antibióticos: Al proporcionar diagnósticos precisos en corto tiempo, se disminuye la prescripción innecesaria de antibióticos, contribuyendo a combatir la resistencia antimicrobiana.
- Eficiencia en la Atención Sanitaria: La implementación de pruebas POC puede reducir la duración de hospitalizaciones y estancias en urgencias, aliviando la carga sobre los sistemas de salud y disminuyendo el riesgo de infecciones nosocomiales.
- Mejora en la Vigilancia Epidemiológica: Estas pruebas facilitan el monitoreo en tiempo real de enfermedades, permitiendo intervenciones oportunas y una asignación eficiente de recursos para contener brotes, especialmente en áreas rurales o de difícil acceso.
El Dr. Oscar Guerra, director médico de Abbott, enfatizó: «Las pruebas rápidas en el punto de atención cambian las reglas del juego para el tratamiento de las infecciones respiratorias en América Latina. Con la capacidad de identificar de forma rápida y precisa infecciones como la influenza, el COVID-19 y el VSR, podemos mejorar los resultados de los pacientes, reducir el uso innecesario de antibióticos y aliviar la presión sobre nuestros sistemas sanitarios».
Lea también: Muerte de estudiante en Usme por IRA: autoridades refuerzan medidas
Por su parte, el Dr. Carlos Arturo Álvarez Moreno, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Colombia y coordinador designado por la OMS para estudios nacionales de COVID-19, señaló: «El diagnóstico temprano y preciso no solo ayuda a iniciar el tratamiento a tiempo, sino que también desempeña un papel clave en la prevención de una mayor propagación de las infecciones».
Retos y Recomendaciones para la Implementación
El consenso también identifica desafíos para la adopción generalizada de las pruebas POC en América Latina, incluyendo barreras regulatorias, infraestructura limitada y la necesidad de coordinación regional para establecer estándares comunes. Para abordar estos retos, se proponen las siguientes acciones:
- Marcos Regulatorios Estandarizados: Establecer armonización regional en los procesos de aprobación, desarrollando requisitos técnicos uniformes y acuerdos de reconocimiento mutuo entre países.
- Inversión en Innovación Diagnóstica: Fomentar el desarrollo de nuevas tecnologías de diagnóstico para enfrentar variantes emergentes con mayor transmisibilidad y capacidad de evasión inmunitaria, asegurando que las pruebas mantengan su sensibilidad y precisión.
- Iniciativas Educativas: Implementar programas educativos dirigidos tanto al público general como a profesionales de la salud, promoviendo el uso adecuado de las pruebas y mejorando comportamientos relacionados con la prevención de la transmisión de las IRAs.
Este consenso representa un paso significativo hacia la mejora del diagnóstico y tratamiento de las infecciones respiratorias agudas en América Latina, con el potencial de transformar la atención sanitaria y fortalecer la resiliencia de los sistemas de salud en la región.
Síguenos en Instagram y mantente informado de las noticias que están haciendo historia. ¡Construyamos juntos el debate sobre los hechos más significativos!