
Por: Laura Nicolette Escandón Beltrán
El rapero estadounidense Kendrick Lamar, reciente ganador de cinco premios Grammy, incluidos los de Canción del Año y Grabación del Año por Not Like Us, una pieza que en su momento generó gran controversia por ser una tiradera contra el también rapero Drake, se presentó el domingo 9 de febrero en el Super Bowl. Su actuación ofreció un espectáculo completo para los millones de espectadores que siguieron el evento.
¿Qué se vivió en el medio tiempo del Super Bowl?
Como principal espectador estuvo el actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, siendo el primer mandatario en presentarse en el Super Bowl, el cual se celebró en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, Luisiana, donde el equipo Philadelphia Eagles ganó con 40 puntos frente a los Kansas City Chiefs, que obtuvieron 22. Esta victoria les otorgó su segundo título en la historia de la franquicia, el primero fue en el 2018.
Esta presentación estuvo llena de simbolismos, entre ellos, quien abrió el show, Samuel L. Jackson, representando al Tío Sam, una figura emblemática de América. Estuvo haciendo varias intervenciones relacionadas con el show, en el cual el escenario simulaba un videojuego, pues tenía los cuatro botones del PlayStation. Además, durante la presentación, en el público aparecían mensajes como: «STAGE 1» y «WARNING WRONG WAY».

Después de cantar su primera canción, BODY 4 BODY, Kendrick dice: “La revolución va a ser televisada, escogieron el momento correcto, pero al tipo equivocado”. Luego, como segunda canción, cantó SQUABBLE UP. Acto seguido, llega el Tío Sam a regañarlo, expresándole que lo que estaba haciendo era demasiado ruidoso y peligroso, términos que muchas veces se asocian con el género del hip hop, y le pregunta: “¿Seguro que sabes jugar?”. Luego de esto, canta HUMBLE y DNA, donde esta última siguió con la idea del ruido que cultivó Kendrick Lamar durante el show.
En la siguiente fase, Kendrick cantó EUPHORIA y MAN IN THE GARDEN, donde el escenario se basaba en un poste de luz en el centro del escenario, rodeado por los amigos del rapero. De repente, llega el Tío Sam y dice una de las frases más impactantes: cabe aclarar que todos los hombres que rodeaban esta escena son hombres negros en la calle, y dice: “Se descuenta una vida”.
Seguido de esto, Kendrick interpretó PEEKABO, donde hay una pausa y el rapero dice: “Quiero cantarles su canción favorita, pero sabes que les encanta demandar”, cambiando todo para cantar LUTHER y ALL THE STARS. En ese momento, entra el Tío Sam para felicitarlo, diciéndole que eso es lo que quiere Estados Unidos: algo lindo y calmado, que iba por buen camino y que ya casi conseguía llegar a ese nivel. Sin embargo, este fue interrumpido por las primeras notas de NOT LIKE US.

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NOT LIKE US y Kendrick Lamar en el Super Bowl
La canción Not Like Us surgió en el contexto de una disputa entre Kendrick Lamar y Drake. Para Lamar, el rapero canadiense no proviene del ghetto ni ha experimentado las dificultades de la vida en la calle, por lo que considera que no debería rapear sobre situaciones ajenas a su realidad. Tras el éxito de Not Like Us, los fanáticos declararon a Kendrick Lamar como el vencedor de la rivalidad.
Cabe recordar que Drake presentó una demanda por difamación contra UMG Recordings, Inc. en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York debido a la canción de Kendrick Lamar. Aunque se especulaba que Lamar evitaría hacer referencia al tema, en el minuto 10:49 de su presentación, miró a la cámara, sonrió y cantó: “Say, Drake, I hear you like…”.
Un momento icónico fue cuando todo el estadio coreó junto con Kendrick: “A minor”. Seguido de esto, aparece Serena Williams, exjugadora de tenis, quien tuvo una relación con Drake, saliendo y bailando CRIP WALK.
Por último, Kendrick cierra con TV OFF, enviando un mensaje claro: recalcando su frase «la revolución va a ser televisada» y dando el consejo al público de que apague la televisión, ya que no tiene por qué jugar ese juego. Se apaga la luz del escenario y se refleja GAME OVER.
Kendrick Lamar ofreció un espectáculo que cumplió con las expectativas del público y, además, reafirmó la importancia de la cultura hip-hop, destacando su papel fundamental dentro de la identidad musical de Estados Unidos.
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