Redactado por: Thalía Pico Cagua.
El grupo terrorista Ejército de Liberación Nacional (ELN) continúa siendo una amenaza para la población civil y las fuerzas de seguridad en Colombia. El pasado18 de agosto, el soldado Luis Felipe Cerpa fue la más reciente víctima de una mina antipersonal instalada por el grupo guerrillero en la vereda de San José municipio de Novita, Chocó. El soldado sufrió graves heridas en su pierna derecha mientras participaba en operaciones de control y presencia institucional, como parte de la fuerza conjunta del Ejército Nacional.
De acuerdo con el comunicado emitido por las fuerzas militares, el incidente ocurrió cuando Cerpa junto con sus compañeros, patrullaba la zona, una de las más golpeadas por la violencia. Tras la detonación, el soldado fue atendido de inmediato por los enfermeros militares, quienes lograron estabilizarlo lo antes posible y ser evacuado en una aeronave hacia Medellín, donde actualmente recibe atención médica especializada.
Las autoridades militares condenan el ataque, calificándolo como una cobarde práctica que no solo afecta la fuerza pública, sino que también a la población que transita habitualmente por estas zonas. Estos hechos siguen sembrando terror en las regiones más vulnerables del país, utilizando minas antipersonas en territorios en donde niños, mujeres y civiles pasan a diariamente.
“Esto es una clara violación de los derechos humanos”, expresó el comandante general de las Fuerzas Militares en un comunicado oficial. Además, reiteró el compromiso del Ejército de garantizar la seguridad y el bienestar de las comunidades en el sur del Chocó.
En el año, más de 36 personas han sido víctimas de minas antipersonas en el departamento del Chocó según cifras de la Acción Integral Contra minas Antipersonal (AICMA), departamento donde el ELN controla ignorando las normas internacionales que arriesgan la vida de todos.
El caso del soldado Luis Felipe Cerpa es solo uno de muchos en un conflicto que parece estar lejos de terminar, con las minas antipersonas cobrando más vidas y dejando a soldados y civiles marcados por la violencia que el ELN sigue ejerciendo, mientras afirma estar comprometido con la paz.