Es el rostro más reconocido del periodismo noctámbulo en el país. Un trabajador incansable. Dos décadas de labor periodística. Noche tras noche, recorre las calles de Bogotá buscando historias que contar.
Redactado por: Jeffer Ruiz. Practicante voluntario CAM Media Lab
Edward Porras, egresado del programa de Comunicación Social de la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Sus inicios fueron en Discovery Channel; trabajó también en otros medios como City TV y Canal Capital, antes de llegar al Canal Caracol. Su experiencia en el trabajo nocturno no comenzó en Caracol, sino en City TV, bajo la dirección de Martha Lucía Ávila, actual corresponsal de RCN en Washington.
Noche a noche recorre las calles de la fría capital del país junto a su equipo de trabajo: el camarógrafo Juan Pablo Molina; Cristian, su asistente de cámara; y Fredy “Fitipaldi” Molina, conductor; para informar cada mañana de lo que sucede “mientras nosotros dormimos”. Su labor es tan ejemplar y significativa, que en la emisión matutina de Noticias Caracol ya existen otros Ojos de la Noche en otras ciudades de Colombia, como Medellín y Cali, los cuales dan su reporte dos veces a la semana.
Con respecto a sus inicios, aclara que él no fue el primer periodista en trabajo nocturno en la televisión colombiana. Esta labor se inició en City TV, quienes fueron los pioneros en el periodismo noctámbulo. Luego de que algunos periodistas intentaron este trabajo, quedó como el principal reportero nocturno en ese canal, antes de pasar a Caracol y Caracol Radio.
Sorprende mañana a mañana a todos los televidentes reportando las noticias de la madrugada, pero muchas de estas personas sienten la curiosidad de saber cómo es un día de trabajo de Edward Porras.
¿A qué horas empieza y a qué horas termina? ¿Qué hace durante su jornada?
En este sentido, cuenta que su jornada comienza en la tarde, hacia las cuatro, cuando llega al canal para revisar pautas y notas para ese día, y comenzar a analizar posibles sitios para visitar. Del canal sale a las nueve de la noche, junto a su equipo, para recoger las noticias que ocurren durante la noche capitalina, de la cual tiene que entregar dos reportes, uno a las 4 de la mañana para Caracol Radio, y uno a las 4:30 para Noticias Caracol, canal en el que adicionalmente sale en vivo en la primera emisión de noticias del día. Su jornada, idealmente, termina a las 7:30 am.
El periodismo en la actualidad
Uno de los principales problemas que Edward le ve al periodismo actual, es la adicción a la tecnología que sufren quienes ejercen la profesión hoy por hoy, lo cual los vuelve “tontos útiles” de los dispositivos electrónicos. “El periodismo debe estar en la calle, con las personas; ellos son las principales fuentes que se deben tener en la profesión”, menciona. También se aleja de aquellos periodistas que, incluso afirma sin decir nombres, tienen hasta grupos de WhatsApp donde comparten noticias, por lo que “todos terminan diciendo lo mismo, sin que exista un elemento diferenciador que los destaque y le dé calidad a su trabajo”.
Las historias en las noticias
Para el reportero, la noticia está con el que “vende tintos, con el barrendero; incluso, tengo un conocido que tiene una máquina barredora y trabaja de noche, que allá donde está, si tiene alguna noticia que podría ser interesante, me escribe al teléfono y salgo para allá de inmediato”.
Porras describe a Bogotá como una ciudad que no duerme. Es una ciudad dinámica, viva, cuyo mismo movimiento se ha visto incrementado en los últimos años. “Antes, Bogotá era una ciudad que a las 10 de la noche, ya cesaba su actividad, y usted conseguía las calles vacías, ahora, es muy fácil encontrar trancones a toda hora y en todo lado: a medianoche, por la 68, en todas partes. Bogotá es muy activa, muy dinámica, y eso existe hasta en la noche”.
Por otro lado, reconoce que la labor con las fuerzas de la policía es buena, ya que, como para mucha gente, para ellos también se ha vuelto una cara reconocida. Relata, incluso, que ya no es necesario para él pedir acompañamiento policial durante el cubrimiento de una nota en ciertos sectores considerados peligrosos en la ciudad. “Nos pasó recientemente cuando fuimos a cubrir una nota de un niño al que le regalaron una silla de ruedas. Cuando llegamos, los comerciantes nos preguntaban por la policía, por el acompañamiento, y nosotros les dijimos que tranquilos, que no pasaba nada”. Y es que, después de tanto tiempo ejerciendo la reportería de calle, Porras parece estar acostumbrado, aunque resalta que tampoco se descuida porque los peligros de la noche siempre están presentes.
En cuanto a las personas, y dado que su labor es estar en contacto directo con la gente, ve como algo muy natural el hecho de ser reconocido. “Es normal que uno esté dando una nota, y la gente baje, se tome un par de fotos con uno incluso con el carro de medicina legal ahí atrás, y luego se vuelvan a ir a su casa a dormir”. A pesar de lo anterior, resulta ser muy hermético en redes: quizá por seguridad, sus perfiles tienen información netamente profesional.
Cada noche es diferente, cada dinámica es distinta, y se pueden presentar situaciones en cualquier momento. Por eso, este gran periodista defiende que no hay un momento que recuerde como especialmente más peligroso que otros en su carrera. A pesar de ello menciona una ocasión en la que, aún laborando para CityTV, se presentó una balacera en un popular sector de Ciudad Bolívar, en Bogotá, y las balas impactaban muy cerca de donde él y su equipo donde se encontraban refugiados.
El periodismo en Colombia
Al ser consultado acerca de cómo ve el ejercicio del periodismo en Colombia, y si actualmente los periodistas tienen seguridad para llevar a cabo su labor, responde: “sí claro, pero todo depende de la personalidad y el sello que le pongas a tu trabajo, y a la capacidad que tengas de hacerlo respetar. Uno como periodista siempre tiene que estar dispuesto a decir la verdad”.
Menciona que lo suyo siempre ha sido ser reportero, trabajar de noche y buscar historias, así que, en caso de tener la oportunidad de hacer otro programa en Caracol, sería un programa de esos temas, de historias, de la gente.
Periodistas en formación “No es crear un personaje, es ser original y auténtico”
Cierra la conversación con un consejo para las nuevas generaciones, para los periodistas en formación: para el periodista, la tecnología solo debe ser un apoyo. Los aspirantes a reporteros deben salir, tener respeto por sus fuentes; además, describe a la gente, las personas, como la principal fuente de historias y de datos. Adicionalmente, menciona como algo importante imprimir un sello a su trabajo. “No es crear un personaje, es ser original y auténtico”, dice, con la honestidad que lo caracteriza.
