Por: Angie Daniela Flórez, Paula Daniela Ardila
Conversatorio sobre violencia racial policial, dirigido por Camila Ortiz e integrado por los invitados Alí Bantú Ashanti, del colectivo Justicia Racial, y Gloria Martínez “Goyo” de ChocQuibTown.
“El conversatorio de hoy va a girar sobre un tema bastante interesante, la violencia racial policial”. Esta fue la frase de con la que Camila Ortiz dio inicio al Conversatorio sobre violencia racial policial y dio paso a los invitados especiales Alí Bantú Ashanti, director del Colectivo de abogados Justicia Racial, y Gloria Emilse Martínez Perea, conocida como “Goyo”, cantante afrocolombiana, productora y cofundadora del grupo musical ChocQuibTown, también conocida como rapera, compositora y artista que lucha por la igualdad de género e inclusión de la comunidad afrodescendiente.
Alí Bantú Ashanti es reconocido por ser un luchador de los derechos del pueblo negro-afrodescendiente y estratega comprometido con los cambios sociales, el cual se define como un abogado de las causas de los más desfavorecidos, con experiencia en el litigio constitucional en temas étnicos raciales.
“¿Han experimentado variedades de racismo y discriminación a medida que se movían en diversos lugares?, es decir, ¿ustedes creen que hay una especie de biografía del racismo y que en ciertos lugares el ser de raza negra puede resultar dificultoso mientras que en otros, una oportunidad?” Fue la pregunta que abrió este conversatorio, por parte de la moderadora. Goyo contó su experiencia y lo que ha sido el transcurso de su vida en diferentes ámbitos y espacios como lo ha sido, por ejemplo, en un lugar como el Chocó donde la gran mayoría de personas son afro y de esta manera, en vez de sentir miedo o algún tipo de rechazo, se ha sentido protegida, como si no le hiciera falta nada, a diferencia de cuando está en Bogotá o en Estados Unidos, puesto que allí ha vivido discriminación tanto por su color de piel y por ser extranjera.
Así mismo Alí, apoya ciento por ciento esta idea, manifiesta que en ningún lugar o momento el ser una persona afro va a ser una oportunidad, lo define como una carga, dando una definición de racismo como una ideología hegemónica que plantea una superioridad de un grupo sobre otro, en este caso las personas de tez blanca sobre las personas de tez oscura.
Goyo retoma la pregunta, comenta y explica que no importa ser artista, una persona conocida, un alto funcionario o la cantidad de dinero que se gane, puesto que nunca se logrará un escape total de esas miradas que suelen juzgar y generar rechazo. Tal vez en unos lugares más que en otros, pero eso no significa que no suceda, ya que pueden existir sitios donde sus pensamientos e ideologías están basadas en la discriminación y el racismo.
Uno de los casos más conocidos en el transcurso de esta pandemia fue la muerte de George Floyd en Estados Unidos, quien falleció el 25 de mayo cuando un policía hizo que se tirará al suelo para apoyar su rodilla en el cuello de George, quien durante casi nueve minutos, permaneció inmóvil y sin pulso, porque aparentemente canceló una factura con un billete falso. Lamentablemente, la historia en Colombia no es muy diferente, tal y como lo demuestran los hechos: al menos diez personas afrocolombianas han sido asesinadas presuntamente a manos de la Policía Nacional en el marco de cumplimiento de las funciones en medio de la pandemia; los hechos ocurridos en Buenaventura, Puerto Tejada, Cartagena son algunos de los que más se recuerdan.
Por esto, Goyo expresa su indignación dando claridad que este tipo de eventos se han vuelto comunes en el marco colombiano, donde lo primero que hacen los ciudadanos es convertir en victimaria a la víctima. Apoyando la idea de Goyo, Alí expresa que en Colombia se han acostumbrado a justificar la muerte en vez de la vida, hablando de un patrón donde la policía se siente con el derecho de matar a una persona afro en cualquier territorio del país.
Con todo lo que ha ocurrido en el mundo, este es el momento donde hay que hacer transformaciones, ya sea implementando programas o incluso creando leyes, para trabajar en un cambio profundo, donde desde el amor, el respeto y la igualdad se logre llegar a la mejor vía de solución: el diálogo.
Sin embargo, ¿de qué otra manera se puede combatir el racismo? Los participantes comentaron que hay medidas que el gobierno debería tomar, como enjuiciar la brutalidad policial, reformar lo que está mal desde la base, entre otras muchas cosas, así sea un proceso largo y complejo. Por esto también hay acciones que como ciudadanos e individuos se pueden hacer, la intolerancia suele basarse en la ignorancia, por lo que la educación y el vistazo al pasado, para no repetir los mismos errores, son primordiales.
Aprender sobre el movimiento de derechos civiles es tan fácil como mirar el discurso de Martin Luther King, “I Have a Dream”, leer literatura negra o ver películas y documentales sobre los afrodescendientes también ayuda al cambio porque desde la percepción de la situación, todo puede mejorar. Y ya con todo esto, debe haber un manejo puntual y significativo desde los medios, redes sociales, amplificar esas voces negras y no callar ante el racismo, y mucho menos usar insultos raciales, porque la solidaridad es importante, las palabras son valiosas y las vidas mucho más.
Participantes conversatorio sobre violencia racial policial
Gloria Emilce Martínez Perea, ‘Goyo’, cantante, rapera y compositora afrocolombiana, productora y fundadora de la banda ChocQuibTown.
Alí Bantú Ashanti, reconocido luchador de los derechos del pueblo afrodescendiente, litigante, estratega comprometido con la justicia y los cambios sociales, director del colectivo Justicia Racial y experto en temas étnicos raciales.
Camila Ortiz Rodríguez, abogada de la Universidad Autónoma de Colombia, especialista en Ciencias Penales y Criminológicas de la Universidad Externado de Colombia y miembro activo del colectivo Justicia Racial.
